Aparentar rechazo para luego pactar como estaba previsto desde un principio, o pactar o no según cálculos electorales o intereses particulares.
Consiste en aparentar un rechazo a, por ejemplo, llegar a un acuerdo con un partido, escenificando desencuentros o haciendo declaraciones en prensa en ese sentido, para luego, al final, dar un giro con alguna excusa. Se parece a la famosa estrategia de dos pasos adelante y uno atrás: se aprueba una medida extrema y luego se da marcha atrás sólo en parte, dando la apariencia de abandonar la iniciativa. Pero en realidad hay un pequeño avance.
Otros métodos de manipulación